Impactos de la nueva ley 7/2023 sobre la protección de los derechos y el bienestar de los animales en las administraciones locales.
Hemos tenido la oportunidad y el placer de colaborar con la Federación Española de Municipios y Provincias en la celebración de una jornada monográfica sobre el impacto, los impactos, que se están produciendo a nivel de las administraciones locales por la entrada en vigor y aplicación de la nueva Ley 7/2023 sobre la protección de los derechos y el bienestar de los animales el pasado 20 de marzo.
La jornada estuvo inaugurada por el Secretario Genera de la Federación, D. Luis Martínez-Sicluna, agradeció la asistencia a todas las personas conectadas. Resaltó el interés y la importancia del tema de la jornada, y la estrecha colaboración que mantiene la Federación con nuestra asociación. Aprovecho el acto para comunicar la voluntad de consolidar la relación de la Federación Española de Municipios y Provincias F.E.M.P. con la Asociación Española de Veterinarios Municipales A.V.E.M. mediante la firma de un convenio de colaboración.
La jornada iba dirigida a los cargos electos de las corporaciones locales y a los funcionarios, técnicos y jurídicos de estas administraciones. A la vista del número de inscripciones: 792 y de asistentes en directo: 550 podemos considerar que ha sido un éxito y que el tema que se trató está generando una profunda preocupación en las administraciones locales.
Hubo tres temas que destacaron ampliamente. Las ambigüedades o aspectos no explicados suficientemente en la ley, que nos conduce a la necesidad de un reglamento lo antes posible y la carencia de medios humanos, de instalaciones y económicos para poder atender todas las responsabilidades y obligaciones que la Ley asigna a las corporaciones locales en general y a los ayuntamientos en particular.
Aunque algunos aspectos contemplados en la Ley ya eran competencias y responsabilidades de las corporaciones locales, ahora se suman otras como la gestión y el control de las colonias felinas urbanas, que han provocado una profunda preocupación. Es una ley de máximos que no ha tenido un periodo de preparación y adaptación suficiente de los municipios para su oportuno cumplimiento. Ello unido a los cambios legislativos que se han producido en otras leyes fundamentales como el Código Penal, especialmente por los delitos relacionados con el maltrato animal, preocupan a las administraciones locales.
Con la nueva Ley la situación se va a complicar mucho más especialmente por el lado legal y de responsabilidad de personas, profesionales veterinarios y administraciones. Las denuncias por presunto maltrato animal van a estar a la orden del día.
Al impacto sobre la organización del trabajo en las administraciones hay que sumarle el impacto económico que supone la aplicación de la nueva ley y el impacto social en la convivencia de los vecinos, ya que no todos están convencidos de la necesidad y conveniencia de algunos aspectos de la Ley. Los conflictos y las denuncias entre vecinos están aumentando, Finalmente hay otros impactos, quizás menos percibidos por una gran parte de la población, pero también de gran importancia y es el causado sobre la biodiversidad, especialmente por las colonias felinas urbanas y el aumento de enfermedades zoonóticas en personas transmitidas por los gatos.